Los montes y los ríos cambian sin cesar, los arroyos fluyen cauce abajo, y la vida del hombre es menos perdurable que la tierra y el cielo. ¡Sólo Dios Todopoderoso es la vida eterna resucitada, que vive eternamente de generación en generación! Todas las cosas y los acontecimientos están en Sus manos, Satanás está bajo Sus pies.
Hoy, que Dios nos haya salvado de las garras de Satanás se debe a Su selección predestinada. Ciertamente Él es nuestro Redentor. La eterna vida resucitada de Cristo está forjada en nuestro interior, de manera que estamos destinados a conectarnos con la vida de Dios, podemos estar con Él cara a cara, comerlo, beberlo y disfrutarlo. Esta es la minuciosa y generosa entrega de Dios.
El invierno da paso a la primavera, a través del viento y la escarcha. Ni la fe de Dios ni la resolución disminuyen por el encuentro con cuantos dolores, persecuciones y tribulaciones de la vida, ni con los rechazos y calumnias del mundo, ni con las incriminantes acusaciones del gobierno. Incondicionalmente por la voluntad de Dios, para que Su gestión y Su plan se cumplan, Él deja Su propia vida a un lado. No escatima esfuerzo por Su pueblo, lo alimenta y riega con esmero. Independientemente de lo ignorantes y difíciles que seamos, sólo necesitamos obedecer ante Él y la vida resucitada de Cristo cambiará nuestra vieja naturaleza… Por estos hijos primogénitos, Él trabaja incansablemente y se priva de alimento y sueño. ¡Por cuántos días y noches, por cuántos calores abrasadores y fríos helados, Él vigila sin reservas en Sion!
Ya pasados por completo el mundo, el hogar y el trabajo, por voluntad propia y sin placeres mundanos que lo toquen… Las palabras de Su boca traspasan nuestro interior y exponen las cosas ocultas en lo profundo de nuestros corazones. ¿Cómo no podemos estar convencidos? Cada frase que sale de Su boca se realiza en cualquier momento en nosotros. No hay acción nuestra, pública y privada, que Él no conozca, que Él no vea, sino que en realidad todo aparecerá ante Él, a pesar de nuestros propios planes y disposiciones.
Al sentarnos ante Él, nuestro espíritu disfruta, cómodo y tranquilo, siempre sintiéndose vacío por dentro, verdaderamente en deuda con Dios. Este es un prodigio difícil e inimaginable. ¡El Espíritu Santo demuestra con amplitud que Dios Todopoderoso es el único Dios verdadero! ¡Indiscutible! ¡Nosotros, este grupo de personas, somos en realidad tan bendecidos! De no ser por la gracia y la misericordia de Dios, deberíamos ir a la perdición y seguir a Satanás. ¡Sólo Dios Todopoderoso puede salvarnos!
¡Ah, Dios Todopoderoso, el Dios práctico! Eres Tú quien has abierto nuestros ojos espirituales, para que podamos contemplar los misterios del mundo espiritual. Las perspectivas del reino son infinitas. Mantente vigilante y a la espera. El día no puede estar muy lejos.
Las llamas de la guerra se arremolinan, el humo de las armas anda sin rumbo, el tiempo se vuelve más caluroso, el clima cambia, una plaga se propagará y las personas deben morir, con poca esperanza de sobrevivir.
¡Ah, Dios Todopoderoso, el Dios práctico! Eres nuestra torre fuerte. Eres nuestro refugio. Nos acurrucamos bajo Tus alas, y la calamidad no puede alcanzarnos. Esto es Tu divina protección y cuidado.
¡Todos alzamos nuestras voces para cantar alabanzas, alabanzas que resuenen por todo Sion! Dios Todopoderoso, el Dios práctico, ha preparado para nosotros ese destino glorioso. Mantente vigilante, ¡vigilante! El momento no puede estar muy lejos.
De "La Palabra manifestada en carne"
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