El Relámpago Oriental, Dios Todopoderoso, es la segunda venida del Señor Jesús. Las ovejas de Dios oyen la voz de Dios. ¡En tanto leas las palabras de Dios Todopoderoso, verás que Dios ha aparecido! Invitamos a quienes buscan la verdad con el corazón a venir aquí y mirar.

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sábado, 19 de septiembre de 2020

Palabras diarias de Dios | Fragmento 44 | "La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo II"


Palabras diarias de Dios | Fragmento 44 | "La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo II"

Satanás tienta a Job una vez más (aparecen llagas por todo su cuerpo)
A. Las palabras que Dios pronunció
(Job 2:3) Y Jehová dijo a Satanás: ¿Has considerado a Mi siervo Job? No hay ningún otro como él en la tierra, un hombre perfecto y recto, que teme a Dios y se aparta del mal. Y aún mantiene su integridad, a pesar de que has tratado de ponerme contra él, de destruirlo sin ninguna razón.
(Job 2:6) Y Jehová le dijo a Satanás: Mira, él está en tu mano, pero salva su vida.
B. Las palabras que pronunció Satanás
(Job 2:4-5) Y Satanás respondió a Jehová, y dijo: Piel por piel, sí, el hombre dará todo lo que tiene a cambio de su vida. Pero estira Tu mano ahora y toca sus huesos y su carne y te maldecirá de frente.
En medio del sufrimiento extremo, Job se da cuenta realmente del cuidado de Dios por la humanidad
Después de las preguntas de Jehová Dios a Satanás, este estaba secretamente feliz. Sabía que tendría permiso una vez más para atacar al hombre perfecto a los ojos de Dios, y esto era una oportunidad rara para Satanás. Quería usarla para socavar por completo la convicción de Job, para hacerle perder la fe en Dios y que no le temiese más ni bendijese el nombre de Jehová. Esto le proporcionaría una oportunidad a Satanás: cualquiera que fuera el lugar o el momento, sería capaz de hacer de Job un juguete bajo su mando. Satanás escondía sus ardides malvados sin dejar huella, pero no podía mantener su naturaleza maligna bajo control. Esta verdad se entrevé en su respuesta a las palabras de Jehová Dios, tal como lo registran las escrituras: “Y Satanás respondió a Jehová, y dijo: Piel por piel, sí, el hombre dará todo lo que tiene a cambio de su vida. Pero estira Tu mano ahora y toca sus huesos y su carne y te maldecirá de frente” (Job 2:4-5). Las personas no pudieron evitar adquirir un conocimiento y un sentido sustanciales de la malicia de Satanás a partir de este diálogo entre Dios y Satanás. Habiendo oído estas falacias de Satanás, todos aquellos que aman la verdad y detestan el mal aborrecerán indudablemente más su bajeza y su desfachatez, se sentirán horrorizados y asqueados por sus falacias y, al mismo tiempo, ofrecerán oraciones profundas y deseos sinceros por Job, pidiendo que este hombre de rectitud logre la perfección, deseando que este hombre que teme a Dios y se aparta del mal venza para siempre las tentaciones de Satanás, viva en la luz y en medio de la dirección y las bendiciones de Dios; desearán, asimismo, que los hechos justos de Job puedan impulsar y alentar a quienes buscan el camino de temer a Dios y apartarse del mal.

Palabras diarias de Dios | Fragmento 42 | "La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo II"


Palabras diarias de Dios | Fragmento 42 | "La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo II"

La reacción de Job
(Job 1:20-21) Entonces Job se levantó y rasgó su ropa; se afeitó la cabeza y cayó al suelo en adoración diciendo: Salí desnudo del vientre de mi madre y desnudo regresaré a él; Jehová dio y Jehová quitó; bendito sea el nombre de Jehová.
Que Job asuma que debe devolver todo lo que posee brota de su temor de Dios 
Después de que Dios dijera a Satanás: “Todo lo que él posee está en tu poder, solo que no pongas tu mano sobre él”, este partió, y pronto se sucedieron ataques repentinos y feroces contra Job: primero, le robaron sus bueyes y asnos, y mataron a sus siervos; después, sus ovejas y siervos se quemaron hasta la destrucción; a continuación, le robaron sus camellos y mataron a sus siervos; finalmente, sus hijos murieron. Esta cadena de ataques fue el tormento sufrido por Job durante la primera tentación. Tal como Dios ordenó, las posesiones de Job y sus hijos fueron el objetivo de estos ataques; él no sufrió daño alguno. Sin embargo, en un instante, Job pasó de ser un hombre poseedor de grandes riquezas a alguien que no tenía nada. Nadie podría haber resistido este asombroso golpe por sorpresa ni haber reaccionado adecuadamente frente al mismo, pero Job puso de manifiesto su lado extraordinario. Las Escrituras proveen el siguiente relato: “Entonces Job se levantó y rasgó su ropa; se afeitó la cabeza y cayó al suelo en adoración”. Esta fue la primera reacción de Job tras oír que había perdido a sus hijos y todas sus propiedades. Sobre todo, no pareció sorprendido ni asustado, ni mucho menos expresó ira u odio. Ves, por tanto, que en su corazón ya había reconocido que estos desastres no eran un accidente ni provenían de la mano del hombre, y mucho menos eran la llegada de la retribución o el castigo. En su lugar, las pruebas de Jehová habían venido sobre él; era Jehová quien quería tomar sus propiedades y sus hijos. Job estaba muy tranquilo y con las ideas muy claras. Su humanidad perfecta y recta le permitía emitir, de forma racional y natural, juicios y decisiones precisos sobre los desastres que habían caído sobre él y, en consecuencia, se comportó con una calma inusual: “Entonces Job se levantó y rasgó su ropa; se afeitó la cabeza y cayó al suelo en adoración”. “Rasgó su ropa” significa que estaba desnudo, y no tenía nada; “se afeitó la cabeza” significa que había vuelto delante de Dios como un bebé recién nacido; “cayó al suelo en adoración” significa que había venido al mundo desnudo, y en ese día, todavía sin nada, había regresado a Dios como un recién nacido. Ninguna criatura de Dios habría podido tener la actitud de Job frente a todo lo que le había sucedido. Su fe en Jehová superaba el ámbito de la creencia; ese era su temor de Dios, su obediencia a Él, y no sólo fue capaz de dar gracias a Dios por darle cosas, sino también por quitárselas. Además, fue capaz de asumir que tenía que devolver todo lo que poseía, incluida su vida.

viernes, 18 de septiembre de 2020

Palabras diarias de Dios | Fragmento 40 | "La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo II"


Palabras diarias de Dios | Fragmento 40 | "La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo II"

 Valoraciones que Dios y la Biblia hacen de Job
(Job 1:1) Hubo un hombre en la tierra de Uz, cuyo nombre era Job; y ese hombre fue perfecto y recto. Era uno que temía a Dios y se apartaba del mal.
(Job 1:5) Y fue así, cuando los días de fiesta habían terminado, que Job los enviaba y los santificaba, y se levantaba muy temprano en la mañana para dar ofrendas de acuerdo con el número de todos ellos; porque Job decía: Tal vez mis hijos han pecado y maldecido a Dios en sus corazones. De esta manera hacía todos los días.
(Job 1:8) Y Jehová dijo a Satanás: ¿Has considerado a Mi siervo Job? No hay ningún otro como él en la tierra, un hombre perfecto y recto, que teme a Dios y se aparta del mal.

Palabras diarias de Dios | Fragmento 39 | "La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo II"


Palabras diarias de Dios | Fragmento 39 | "La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo II"

El carácter de Dios nunca se le ha escondido al hombre: el corazón del hombre se ha apartado de Dios
Desde el momento de la creación, el carácter de Dios ha estado en sintonía con Su obra. Nunca se le ha ocultado al hombre, sino que se le ha anunciado de un modo total y claro. No obstante, con el paso del tiempo, el corazón del hombre se ha alejado cada vez más de Dios, y cuanto más profunda ha sido la corrupción del hombre, más lejos han estado él y Dios. De forma lenta pero segura, el ser humano ha desaparecido de los ojos de Dios. Se ha vuelto incapaz de “ver” a Dios, quien le ha dejado sin “noticias” suyas. Por tanto, no sabe si Dios existe, e incluso llega tan lejos como para negar por completo Su existencia. En consecuencia, que no se comprenda el carácter de Dios ni lo que Él tiene y es, no se debe a que Dios esté escondido del hombre, sino a que su corazón se ha apartado de Él. Aunque el hombre cree en Dios, Él no está en su corazón; no sabe cómo amarlo ni quiere hacerlo, porque su corazón nunca se acerca a Dios y siempre lo evita. Como consecuencia, el corazón del hombre está lejos de Dios. ¿Dónde está entonces su corazón?

jueves, 17 de septiembre de 2020

Palabras diarias de Dios | Fragmento 38 | "La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo II"


Palabras diarias de Dios | Fragmento 38 | "La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo II"

Las personas de los últimos días sólo ven la ira de Dios en Sus palabras, y no la experimentan realmente
Desde el momento de la creación hasta hoy, ningún grupo ha disfrutado tanto de la gracia o la misericordia y la benignidad de Dios como este grupo final. Aunque en la etapa final Él ha realizado la obra de juicio y castigo, y ha llevado a cabo Su obra con majestad e ira, la mayor parte del tiempo Dios sólo usa palabras para hacer Su obra; las usa para enseñar, regar, proveer y alimentar. Entretanto, la ira de Dios siempre se ha mantenido oculta; aparte de experimentar Su carácter iracundo en Sus palabras, muy pocas personas han probado Su enojo en persona. Es decir, aunque la ira revelada en las palabras divinas permite que las personas experimenten la majestad de Dios y Su intolerancia de la ofensa, durante la obra de juicio y castigo de Dios esta ira no va más allá de Sus palabras. Expresado de otro modo, Él usa palabras para reprender, poner en evidencia, juzgar, castigar, e incluso condenar al hombre, pero Dios aún tiene que airarse profundamente con el ser humano; apenas ha desatado Su ira sobre este, sino con Sus palabras. La misericordia y la benignidad de Dios, experimentadas por el hombre en esta era son, por tanto, la revelación de Su verdadero carácter, mientras que Su ira experimentada por el hombre es simplemente el efecto del tono y el sentimiento de Sus declaraciones. Muchas personas consideran erróneamente que este efecto es la experiencia y el conocimiento verdaderos de la ira de Dios. En consecuencia, la mayoría de las personas creen que han visto la misericordia y la benignidad de Dios en Sus palabras, que también han observado Su intolerancia a la ofensa del hombre, y que la mayoría de ellas han llegado incluso a apreciar Su misericordia y Su tolerancia con el hombre.

Palabras diarias de Dios | Fragmento 37 | "La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo II"


Palabras diarias de Dios | Fragmento 37 | "La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo II"

Dios debe destruir Sodoma
Génesis 18:26 Y Jehová dijo: Si encuentro en Sodoma cincuenta justos en la ciudad, salvaré todo el lugar por el bien de ellos.
Génesis 18:29 Y volvió a hablarle otra vez, y dijo: Tal vez puedan haber cuarenta ahí. Y Él dijo: No lo haré.
Génesis 18:30 Y le dijo: Tal vez puedan haber treinta ahí. Y Él dijo: No lo haré.
Génesis 18:31 Y dijo: Tal vez puedan haber veinte ahí. Y Él dijo: No la destruiré.
Génesis 18:32 Y dijo: Tal vez puedan haber diez ahí. Y Él dijo: No la destruiré.

Dios es abundantemente misericordioso con aquellos de los que se preocupa, y profunda ira hacia aquellos a los que detesta y rechaza
En los relatos de la Biblia, ¿había diez siervos de Dios en Sodoma? ¡No! ¿Merecía la ciudad que Dios la salvara? En ella, sólo una persona —Lot— recibió a los mensajeros divinos. La implicación de esto es que al haber un único siervo de Dios en la ciudad, Él no tuvo más elección que salvar a Lot y destruir la ciudad de Sodoma. Estos diálogos entre Abraham y Dios pueden parecer simples, pero ilustran algo muy profundo: son principios de las acciones de Dios, y antes de tomar una decisión Él invertirá un largo tiempo observando y deliberando; decididamente, no tomará decisión alguna ni se precipitará hacia ninguna conclusión antes del momento oportuno. Los diálogos entre Abraham y Dios nos muestran que Su decisión de destruir Sodoma no fue ni lo más mínimo errónea, porque Él ya sabía que no había cuarenta justos en la ciudad ni treinta, ni veinte.

miércoles, 16 de septiembre de 2020

Canción cristiana 2020 | El camino para conocer la autoridad de Dios

  
Canción cristiana 2020 | El camino para conocer la autoridad de Dios
I
Tu conocimiento de la autoridad de Dios,
Su poder, identidad y esencia
no se puede lograr o ganar de tu imaginación.
No lo imagines, no significa no hacer nada,
o sólo siéntate y espera la destrucción.
Significa no infieras usando lógica,
ni estudies a través del conocimiento o ciencia.
Al comer, beber, viviendo las palabras de Dios y comunión,
experimentarás y verificarás la autoridad de Dios,
y obtendrás una comprensión y conocimiento gradual de ello.
Es la única forma, no hay atajos.

Himno cristiano 2020 | Pedro fue quien mejor conoció a Dios


Himno cristiano 2020 | Pedro fue quien mejor conoció a Dios
Pedro fue fiel a Dios durante años,
su corazón nunca mostró ninguna queja.
Ni Job pudo igualarle, ni los santos en muchos siglos.
Trató de conocer a Dios, incluso cuando Satanás conspiraba.
Años de servicio, tras el corazón de Dios;
Satanás no pudo explotarlo.
Pedro fue quien mejor conoció a Dios.
Él conoció a Dios mejor que cualquier otro.

martes, 15 de septiembre de 2020

Himno cristiano 2020 | Dios espera que la humanidad pueda continuar viviendo


Himno cristiano 2020 | Dios espera que la humanidad pueda continuar viviendo
I
Cuando la humanidad se llenó de inmundicia,
desobedeciendo al extremo,
Dios tuvo que destruirlos debido a Sus principios y esencia.
Dios despreció al hombre, porque se opuso a Él.
Pero cuando los destruyó,
Su corazón no cambió, Su misericordia aún permaneció.
II
Dios se compadeció de la humanidad,
queriendo redimir de varias formas.
Pero rechazando la salvación de Dios,
el hombre siguió desobedeciendo.
Sin importar cuánto Dios llamó y advirtió,
cuánto proveyó y ayudó,
el hombre no entendió, el hombre no lo valoró.

Himno cristiano 2020 | Cómo ser perfeccionado


Himno cristiano 2020 | Cómo ser perfeccionado
I
Si quieres ser perfeccionado por Dios,
no basta con recorrer las calles
ni dedicarte por entero a Dios.
Mucho debes poseer para ser perfeccionado por Dios.
Cuando sufres, debes ser capaz
de no pensar en la carne, y no quejarte de Dios.
Cuando Dios se esconde, debes tener fe para seguirlo,
mantén tu amor, no dejes que se apague o muera.
Si quieres que Dios te use y te perfeccione,
debes poseerlo todo:
voluntad para sufrir, fe, resistencia,
obediencia, y experiencia de Su obra,
comprender Su voluntad, ser considerado con Su pesar.
Cada refinamiento que vives requiere de tu fe y tu amor.

lunes, 14 de septiembre de 2020

Palabra de Dios | Fragmento 22 | "La verdadera historia detrás de la obra de la Era de la Redención"


Palabras diarias de Dios | Fragmento 22 | "La verdadera historia detrás de la obra de la Era de la Redención"

La obra de Jesús se hizo de acuerdo con las necesidades del hombre en esa era. Su obra consistía en redimir a la humanidad, perdonarlos por sus pecados, por lo que todo Su carácter fue uno de humildad, paciencia, amor, piedad, tolerancia, misericordia y amorosa bondad. Él bendijo profusamente a la humanidad y le trajo gracia en abundancia y todas las cosas que les fuera posible disfrutar, Él se las dio para su gozo: paz y felicidad, Su tolerancia y amor, Su misericordia y bondad. En aquellos días, todo lo que el hombre encontró fue una abundancia de cosas para disfrutar: su corazón estaba en paz y tranquilo, su espíritu consolado, y estaba sustentado por el Salvador Jesús. Que la humanidad pudiese obtener estas cosas fue una consecuencia de la era en la que vivió. En la Era de la Gracia el hombre ya había sido corrompido por Satanás, por lo que, para surtir efecto, la obra de redimir a toda la humanidad requirió gracia en abundancia, tolerancia y paciencia infinitas y, aún más, una ofrenda adecuada para expiar los pecados de la humanidad. Lo que la gente vio en la Era de la Gracia fue simplemente Mi ofrenda por los pecados de la humanidad: Jesús.

Palabras diarias de Dios | Fragmento 20 | "La obra en la Era de la Ley"


Palabras diarias de Dios | Fragmento 20 | "La obra en la Era de la Ley"

Durante la Era de la Ley, Jehová dio muchos mandamientos para que Moisés se los transmitiera a los israelitas quienes le siguieron saliendo de Egipto. Jehová dio estos mandamientos a los israelitas, quienes no guardaban relación con los egipcios y estaban destinados a restringir a los israelitas y eran Sus requisitos para ellos. Si alguien observaba el Sabbat, si alguien respetaba a sus padres, si alguien adoraba ídolos, etc., estos eran los principios por los cuales uno era juzgado como pecador o justo. Ya fuera que el fuego de Jehová lo golpeara a uno, lo apedrearan a muerte, o recibiera la bendición de Jehová, esto se determinaba de acuerdo a si alguien obedecía estos mandamientos. Aquellos quienes no observaban el Sabbat eran apedreados a muerte. Aquellos sacerdotes quienes no observaban el Sabbat eran golpeados por el fuego de Jehová. Aquellos quienes no respetaban a sus padres también eran apedreados a muerte. Todo esto era elogiado por Jehová. Jehová estableció Sus mandamientos y leyes para que mientras Él guiara sus vidas, el pueblo escuchara y obedeciera Su palabra y no se rebelara contra Él. Usó esas leyes para controlar a la recién nacida raza humana, para poner fundamento de Su obra por venir. Y así, por causa de la obra que Jehová hizo, la primera era se llamó la Era de la Ley. Aunque Jehová habló mucho e hizo muchas obras, sólo los guió de un modo positivo, enseñándoles a este pueblo ignorante cómo ser humano, cómo vivir, cómo entender el camino de Jehová.

domingo, 13 de septiembre de 2020

Palabras diarias de Dios | Fragmento 19 | "La obra en la Era de la Ley"


Palabras diarias de Dios | Fragmento 19 | "La obra en la Era de la Ley"
Antes de los dos mil años durante los cuales Jehová hizo Su obra, el hombre no sabía nada y casi todos se degeneraron a lo profundo de la promiscuidad y la perversión que precedieron al diluvio: sus corazones estaban desprovistos de Jehová, no digamos ya Su camino. Nunca entendieron la obra que Jehová iba a hacer; les faltaba la razón, mucho menos el conocimiento, como máquinas vivientes que respiran, ignorantes del hombre, de Dios, de todas las cosas y de la vida por igual. En la tierra se involucraron en mucha seducción, como la serpiente, y dijeron muchas cosas que fueron ofensivas a Jehová, pero porque eran ignorantes, Jehová no los castigó ni los disciplinó. Después del diluvio, cuando Noé tenía 601 años, Jehová formalmente se le apareció a Noé y lo guió a él y a su familia, conduciéndolo a él, a los pájaros y a las bestias, que sobrevivieron el diluvio y a sus descendientes hasta el fin de la Era de la Ley, un total de 2500 años. Estuvo obrando de una manera formal en Israel durante 2000 años y el periodo en el que estuvo obrando tanto en Israel como fuera de Israel fue de 500 años, que juntos suman 2500 años. Durante este periodo Él les enseñó a los israelitas que para servir a Jehová debían construir el templo y usar las túnicas de los sacerdotes y caminar descalzos en el templo al amanecer, para que sus zapatos no ensuciaran el templo y cayera fuego sobre ellos de arriba del templo y los quemara hasta la muerte. Cumplían con sus deberes y se sometían a los planes de Jehová. Oraban a Jehová en el templo y después de ser inspirados por Jehová, es decir, después de que Jehová había hablado, guiaban al pueblo y le enseñaban que debían reverenciar a Jehová —su Dios—.

Palabras diarias de Dios | Fragmento 18 | "La obra en la Era de la Ley"


Palabras diarias de Dios | Fragmento 18 | "La obra en la Era de la Ley"

La obra que Jehová hizo en los israelitas instauró entre la humanidad el lugar terrenal del origen de Dios, Su lugar sagrado donde Él estaba presente. Confinó Su obra al pueblo israelita. Al principio, no obró fuera de Israel; en lugar de eso, escogió un pueblo que encontró apropiado para así restringir el alcance de Su obra. Israel es el lugar donde Dios creó a Adán y Eva y del polvo de ese lugar Jehová hizo al hombre; este es el fundamento de Su obra en la tierra. Los israelitas, que son los descendientes de Noé y de Adán, fueron el cimiento de la obra de Jehová en la tierra.
La importancia, propósito y avance de la obra de Jehová en Israel fueron para comenzar Su obra en toda la tierra, gradualmente extendiéndose a las otras naciones a partir de su centro en Israel. Este es el principio de acuerdo en el cual Él obra en el universo, para establecer un modelo, después ampliarlo hasta que toda la gente en el universo haya aceptado Su evangelio.

sábado, 12 de septiembre de 2020

Testimonio cristiano 2020 | Mi liberación de las ataduras (Español Latino)


Testimonio cristiano 2020 | Mi liberación de las ataduras (Español Latino)

El padre de la protagonista era creyente desde hacía años. Cumplía sistemáticamente con su deber de compartir el evangelio y había sido capaz de sufrir y pagar un precio. Sin embargo, no buscaba la verdad, sino la fama, la ganancia y el estatus. Sembraba la discordia entre hermanos y hermanas hasta el punto de excluir y atacar a otros, lo que alteraba gravemente la vida de la iglesia y la entrada de los hermanos y hermanas en la vida. En muchas ocasiones le ofrecieron enseñanzas y ayuda, pero jamás se arrepentía. Por medio de las palabras de Dios, la protagonista consigue discernir que su padre es una malvada persona que está harta de la verdad y la detesta, y que deberían expulsarlo de la iglesia. No obstante, sus emociones la frenan y no se atreve a delatarlo ni a denunciarlo. Busca la verdad leyendo las palabras de Dios y entiende la naturaleza, el peligro y las consecuencias de dejarse llevar por las emociones. Se libera de las ataduras de sus sentimientos personales, logra practicar el amor a aquello que Dios ama y el odio a aquello que Dios odia, y delata la malvada conducta de su padre, tras cuya expulsión mejora la vida de la iglesia, libre de la alteración de una malvada persona.  

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