El Relámpago Oriental, Dios Todopoderoso, es la segunda venida del Señor Jesús. Las ovejas de Dios oyen la voz de Dios. ¡En tanto leas las palabras de Dios Todopoderoso, verás que Dios ha aparecido! Invitamos a quienes buscan la verdad con el corazón a venir aquí y mirar.

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jueves, 11 de abril de 2019

La obra en la Era de la Ley

Jehová ,Adán y Eva,
La obra que Jehová hizo en los israelitas instauró entre la humanidad el lugar terrenal del origen de Dios, Su lugar sagrado donde Él estaba presente. Confinó Su obra al pueblo israelita. Al principio, no obró fuera de Israel; en lugar de eso, escogió un pueblo que encontró apropiado para así restringir el alcance de Su obra. Israel es el lugar donde Dios creó a Adán y Eva y del polvo de ese lugar Jehová hizo al hombre; este es el fundamento de Su obra en la tierra. Los israelitas, que son los descendientes de Noé y de Adán, fueron el cimiento de la obra de Jehová en la tierra.

En ese momento, la relevancia, propósito y avance de la obra de Jehová en Israel fueron para comenzar Su obra en toda la tierra, gradualmente extendiéndose a las naciones gentiles desde su centro en Israel. Este es el principio de acuerdo en el cual Él obra en el universo, para establecer un modelo, después ampliarlo hasta que toda la gente en el universo haya aceptado Su evangelio. Los primeros israelitas eran los descendientes de Noé. Estas personas sólo tenían el aliento de Jehová y sólo podían hacerse cargo de las necesidades básicas de la vida, pero no sabían qué clase de Dios era Jehová, ni tampoco conocían Su voluntad para el hombre, mucho menos cómo debían reverenciar al Señor de toda la creación. Los descendientes de Adán no sabían qué reglas y leyes debían obedecer o qué obra debían hacer los creados para el Creador. Todo lo que sabían era que el esposo debía sudar y trabajar para proveer a su familia y que la esposa debía someterse a su esposo y perpetuar la raza humana que Jehová creó. En otras palabras, esta gente sólo tenía el aliento de Jehová y Su vida, pero no sabían cómo seguir las leyes de Dios o cómo satisfacer al Señor de toda la creación. Entendían demasiado poco. Así que aunque no había nada torcido o malicioso en sus corazones y aunque rara vez tenían celos y peleaban, no conocían ni entendían a Jehová, el Señor de toda la creación. Estos antepasados del hombre sólo sabían comer lo que Jehová hacía, disfrutar lo que Jehová había hecho, pero no sabían reverenciar a Jehová; no sabían que lo debían adorar sobre sus rodillas. ¿Cómo podrían ser llamadas Sus criaturas? Si esto fuese así, ¿cuáles de las palabras: “Jehová es el Señor de toda la creación” y “Él creó al hombre para que el hombre pudiera manifestarlo, glorificarlo y representarlo”, no habrán sido dichas en vano? ¿Cómo pueden las personas que no sienten ninguna reverencia por Jehová convertirse en testimonios de Su gloria? ¿Cómo pueden ellas convertirse en manifestaciones de Su gloria? ¿Acaso las palabras de Jehová: “Yo creé al hombre a Mi imagen” no se convierten entonces en un arma en las manos de Satanás, el maligno? ¿Acaso no se convierten luego estas palabras en una característica de humillación a la creación del hombre realizada por Jehová? Con el fin de completar esa etapa de la obra, Jehová, después de crear a la humanidad, no la instruyó o guio desde los tiempos de Adán hasta los de Noé. En vez de ello, no fue sino hasta después de que el diluvio destruyera el mundo que Él formalmente comenzó a guiar a los israelitas, que eran los descendientes de Noé y también de Adán. Su obra y Sus declaraciones en Israel dieron guía a todo el pueblo de Israel mientras vivían sus vidas por toda la tierra de Israel, y de esta manera le mostró a la humanidad que Jehová no sólo era capaz de soplar el aliento dentro del hombre para que obtuviera vida de Él y se levantara del polvo a un ser humano creado, sino que Él también podía incinerar y maldecir a la humanidad y usar Su vara para gobernarla. De la misma manera, vieron que Jehová podía guiar la vida del hombre en la tierra y hablar y obrar entre la humanidad de acuerdo a las horas del día y de la noche. Hizo la obra sólo para que Sus criaturas supieran que el hombre vino del polvo que Él recogió, que el hombre fue hecho por Él. Además, la obra que Él comenzó en Israel estaba destinada para que otras personas y naciones (que de hecho no estaban separadas de Israel, sino que se habían ramificado de los israelitas, pero todavía eran descendientes de Adán y Eva) pudiesen recibir el evangelio de Jehová de Israel, para que todas las criaturas en el universo lo reverenciaran y lo tuvieran por grandioso. Si Jehová no hubiera comenzado Su obra en Israel, sino que, después de crear a la humanidad, la hubiera dejado vivir vidas descuidadas sobre la tierra, entonces por la naturaleza física del hombre (naturaleza quiere decir que el hombre nunca puede saber las cosas que no puede ver, es decir, que él no sabe que Jehová creó a la humanidad, mucho menos por qué lo hizo), nunca sabría que Jehová creó a la humanidad y es el Señor de todas las cosas. Si Jehová hubiera creado al hombre y lo hubiera colocado sobre la tierra como Su entretenimiento, entonces simplemente se hubiera sacudido el polvo de las manos y se hubiera ido en vez de guiar entre los hombres por un periodo de tiempo, entonces toda la humanidad habría regresado a la nada; hasta el cielo y la tierra y todas las cosas que Él creó, incluyendo a toda la humanidad habría regresado a la nada y habría sido pisoteada por Satanás. De esta manera el deseo de Jehová de que: “Sobre la tierra, es decir, en medio de Su creación, Él debe tener un lugar donde pararse, un lugar santo”, se habría hecho añicos. Así que en su lugar, después de que Dios creó a la humanidad, la guio en sus vidas y les habló con el fin de llevar a cabo Su deseo, para lograr Su plan. La obra de Dios en Israel estuvo destinada sólo para ejecutar el plan que Él había establecido antes de Su creación de todas las cosas. Y por tanto Su labor primero entre los israelitas y Su creación de todas las cosas no estaban en conflicto entre sí, sino que ambos fueron por el bien de Su gestión, Su obra y Su gloria, profundizando el significado de Su creación de la humanidad. Él guio la vida de la humanidad sobre la tierra por dos mil años después de Noé, durante los cuales les enseñó cómo reverenciar a Jehová el Señor de todas las cosas, les enseñó cómo conducirse y vivir sus vidas y, sobre todo, cómo actuar como testigo de Jehová, cómo obedecerlo y reverenciarlo y cómo alabarlo con música al igual que David y sus sacerdotes.

Antes de los dos mil años durante los cuales Jehová hizo Su obra, el hombre no sabía nada y casi todos se degeneraron a lo profundo de la promiscuidad y la perversión que precedieron al diluvio: sus corazones estaban desprovistos de Jehová, no digamos ya Su camino. Nunca entendieron la obra que Jehová iba a hacer; les faltaba la razón, mucho menos el conocimiento, como máquinas vivientes que respiran, ignorantes del hombre, de Dios, de todas las cosas y de la vida por igual. En la tierra se involucraron en mucha seducción, como la serpiente, y dijeron muchas cosas que fueron ofensivas a Jehová, pero porque eran ignorantes, Jehová no los castigó ni los disciplinó. Después del diluvio, cuando Noé tenía 601 años, Jehová formalmente se le apareció a Noé y lo guio a él y a su familia, conduciéndolo a él, a los pájaros y a las bestias, que sobrevivieron el diluvio y a sus descendientes hasta el fin de la Era de la Ley, un total de 2.500 años. Estuvo obrando de una manera formal en Israel durante 2.000 años y el periodo en el que estuvo obrando tanto en Israel como fuera de Israel fue de 500 años, que juntos suman 2.500 años. Durante este periodo Él les enseñó a los israelitas que para servir a Jehová debían construir el templo y usar las túnicas de los sacerdotes y caminar descalzos en el templo al amanecer, para que sus zapatos no ensuciaran el templo y cayera fuego sobre ellos de arriba del templo y los quemara hasta la muerte. Cumplían con sus deberes y se sometían a los planes de Jehová. Oraban a Jehová en el templo y después de ser inspirados por Jehová, es decir, después de que Jehová había hablado, guiaban al pueblo y le enseñaban que debían reverenciar a Jehová —su Dios—. Y Jehová les dijo que debían construir el templo y el altar, y en el tiempo señalado por Jehová, es decir, en la pascua, debían preparar becerros y corderos recién nacidos como sacrificios sobre el altar para servir a Jehová, con el fin de frenarles y poner en sus corazones reverencia por Jehová. Si obedecían la ley sería la medida de su lealtad a Jehová. Jehová también estableció para ellos el día del Sabbat, el séptimo día de Su creación. El día siguiente, Él hizo el primer día, un día para que ellos alabaran a Jehová, para ofrecerle sacrificios y para hacerle música. En este día, Jehová convocó a todos los sacerdotes para que dividieran los sacrificios sobre el altar de manera que el pueblo comiera y para que pudieran disfrutar los sacrificios sobre el altar de Jehová. Además, Jehová les dijo que eran benditos y tenían parte con Él y que eran Su pueblo escogido (que fue el pacto de Jehová con los israelitas). Es por esto que, hasta el día de hoy, el pueblo de Israel todavía dice que Jehová sólo es su Dios y no el Dios de otros pueblos.

Durante la Era de la Ley, Jehová dio muchos mandamientos para que Moisés se los transmitiera a los israelitas quienes le siguieron saliendo de Egipto. Jehová dio estos mandamientos a los israelitas y no guardaban relación con los egipcios; estaban destinados a restringir a los israelitas. Dios usó los mandamientos para hacerles exigencias. Si ellos observaban el Sabbat, si respetaban a sus padres, si adoraban ídolos, etc., estos eran los principios por los cuales eran juzgados como pecadores o justos. Entre ellos, hubo algunos que fueron golpeados por el fuego de Jehová, algunos que fueron apedreados a muerte y otros que recibieron la bendición de Jehová, y esto se determinaba de acuerdo a si ellos obedecían o no estos mandamientos. Aquellos que no observaran el Sabbat serían apedreados a muerte. Aquellos sacerdotes que no observaran el Sabbat serían golpeados por el fuego de Jehová. Aquellos que no mostraran respeto a sus padres también serían apedreados a muerte. Todo esto era elogiado por Jehová. Jehová estableció Sus mandamientos y leyes para que mientras Él guiara sus vidas, el pueblo escuchara y obedeciera Su palabra y no se rebelara contra Él. Usó esas leyes para controlar a la recién nacida raza humana, para poner fundamento de Su obra por venir. Y así, por causa de la obra que Jehová hizo, la primera era se llamó la Era de la Ley. Aunque Jehová habló mucho e hizo muchas obras, sólo los guio de un modo positivo, enseñándoles a este pueblo ignorante cómo ser humano, cómo vivir, cómo entender el camino de Jehová. En Su gran mayoría la obra que Él hizo tenía la intención de permitirle al pueblo observar Su camino y seguir Su ley. La obra se hizo en gente que está superficialmente pervertida; no se ocupaba de la transformación del carácter o del crecimiento en la vida. Sólo se ocupaba de usar leyes para restringir y controlar a la gente. Para los israelitas de aquel tiempo, Jehová era sólo un Dios en el templo, un Dios en los cielos. Era una columna de nube, una columna de fuego. Todo lo que Jehová les demandaba hacer era obedecer lo que la gente conoce hoy como Sus leyes y mandamientos, incluso podría llamárseles reglas, porque la obra de Jehová no estaba destinada a transformarlos, sino a darles más cosas de las que el hombre debe tener, a decirles de Su propia boca, porque después que el hombre fue creado, el hombre no sabía nada acerca de lo que debía poseer. Y entonces, Jehová les dio las cosas que debían poseer para sus vidas sobre la tierra, hizo que la gente que Él había guiado superara a sus antepasados, Adán y Eva, porque lo que Jehová les dio superaba lo que Él les había dado a Adán y Eva en el principio. Independientemente, la obra que Jehová hizo en Israel fue sólo para guiar a la humanidad y para hacer que la humanidad reconociera a su Creador. No los conquistó ni los transformó, simplemente los guio. Esta es la suma de la obra de Jehová en la Era de la Ley. Esto es en el fondo, la historia verdadera, la esencia de Su obra en toda la tierra de Israel, y el inicio de Sus seis mil años de Su obra, para controlar a la humanidad por la mano de Jehová. De esto surgió más obra en Su plan de gestión de seis mil años.
De "La Palabra manifestada en carne"

miércoles, 10 de abril de 2019

Las experiencias de Pedro: su conocimiento del castigo y del juicio

oración,Pedro

Cuando Dios lo estaba castigando, Pedro oró, “¡Oh Dios! Mi carne es desobediente y Tú me castigas y me juzgas. Me gozo en Tu castigo y en Tu juicio, e incluso si no me quieres, en Tu juicio contemplo Tu justo y santo carácter. Cuando me juzgas para que los demás puedan contemplar Tu justo carácter en Tu juicio, me siento contento. 

CANCIÓN DEL APEGO SINCERO

Dios Todopoderoso,Relámpago Oriental,Iglesia de Dios Todopoderoso



Himno
CANCIÓN DEL APEGO SINCERO
I
Aquí está Uno, Él es Dios hecho carne.
Lo que Él dice, lo que Él hace, todo es verdad.
Su justicia, Su sabiduría, las amo tanto.
Conocerlo, tenerlo, bendecida soy.

martes, 9 de abril de 2019

Conocer a Dios es el camino hacia el temer a Dios y apartarse del mal

Iglesia de Dios Todopoderoso

Cada uno de vosotros deberíais examinar de nuevo vuestra vida de creencia en Dios para ver si, en la búsqueda de Dios, habéis verdaderamente entendido, verdaderamente comprendido y verdaderamente llegado a conocer a Dios, si sabéis realmente qué actitud tolera Dios de los diversos tipos de seres humanos, y si vosotros entendéis verdaderamente qué está obrando Dios en vosotros y cómo define Él cada uno de vuestros actos. 

CÓMO EL HOMBRE DEBERÍA SEGUIR EL CAMINO DE DIOS

Dios Todopoderoso,Relámpago Oriental,Iglesia de Dios Todopoderoso


CÓMO EL HOMBRE DEBERÍA SEGUIR EL CAMINO DE DIOS
I
Seguir el camino de Dios
no se trata de observar las reglas.
Se trata de ver todas las cosas
según lo dispuesto por Dios,
la responsabilidad otorgada,
algo confiado a ti,
pruebas dadas por Él.
Seguir el camino de Dios.
Cuidado en enojar a Dios mismo.
Nunca ofendas el carácter de Dios.
Seguir el camino de Dios.
Seguir el camino de Dios.

lunes, 8 de abril de 2019

Dios y el hombre entrarán juntos en el reposo

Dios Todopoderoso,Relámpago Oriental,Iglesia de Dios Todopoderoso

En el principio Dios estaba reposando. No había seres humanos ni nada más sobre la tierra en aquel entonces y Dios no había hecho ninguna obra. Dios sólo comenzó Su obra de gestión una vez que la humanidad existió y una vez que la humanidad se había corrompido.

domingo, 7 de abril de 2019

Todo el camino en Tu compañía

Dios Todopoderoso,Relámpago Oriental,Iglesia de Dios Todopoderoso


TODO EL CAMINO EN TU COMPAÑÍA
I
Deambulo por el mundo,
desamparado y perdido en mí.
Despierto
por Tus dulces palabras,
he visto la verdadera luz.
Acepto el juicio
de Tus palabras.

La Palabra de Dios | La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo III Parte 2



La Palabra de Dios | La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo (III) Parte 2
Dios Todopoderoso dice: “No existe prohibición en Su obra, y no se verá obligado por ningún hombre, cosa u objeto, y esta no será alterada por ninguna fuerza hostil. En Su nueva obra, Él es el Rey siempre victorioso y pisotea bajo Su escabel, cualquier fuerza hostil y todas las herejías y las falacias de la humanidad. Independientemente de la nueva etapa de Su obra que esté llevando a cabo, debe desarrollarse y expandirse en medio de la humanidad, y debe llevarse a cabo sin estorbo en todo el universo, hasta que Su gran obra haya concluido. Este es la omnipotencia y la sabiduría de Dios, Su autoridad y Su poder”. 

sábado, 6 de abril de 2019

Sólo amar a Dios es realmente creer en Dios

oración,Pedro

Hoy, cuando buscáis amar y conocer a Dios, en un aspecto debéis soportar dificultad y refinamiento, y en otro, pagar un precio. Ninguna lección es más profunda que la de amar a Dios, y puede decirse que la lección que las personas aprenden de una vida de creencia es cómo amar a Dios. Es decir, si crees en Dios debes amarlo.

La Palabra de Dios | La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo (II) Parte 6



La Palabra de Dios | La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo (II) Parte 6
Las palabras de Dios del vídeo son del libro “La Palabra manifestada en carne”.
El contenido del vídeo:
El testimonio de Job trae consuelo a Dios 
Aunque Dios no se ha revelado a Job, él cree en Su soberanía
La fe de Job en Dios no se tambalea porque Él esté escondido de él
Job bendice el nombre de Dios y no piensa en las bendiciones o el desastre
Aunque Dios está escondido del hombre, Sus hechos entre todas las cosas son suficientes para que el hombre le conozca
Si el corazón del hombre está enemistado con Dios, ¿cómo puede temerle y apartarse del mal?

viernes, 5 de abril de 2019

Palabra de vida eterna 2018 | La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo (II) Parte 4-2



Palabra de vida eterna 2018 | La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo (II) Parte 4-2

Las palabras de Dios del vídeo son del libro “La Palabra manifestada en carne”.
El contenido del vídeo:
Las muchas malinterpretaciones de las personas sobre Job
Job maldice el día de su nacimiento porque no quiere que Dios sienta dolor por él
Job derrota a Satanás y se convierte en un hombre de verdad a los ojos de Dios

jueves, 4 de abril de 2019

Palabra de vida eterna 2018 | La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo (II) Parte 4-1



Palabra de vida eterna 2018 | La obra de Dios, el carácter de Dios y Dios mismo (II) Parte 4-1

Las palabras de Dios del vídeo son del libro “La Palabra manifestada en carne”.
El contenido del vídeo:
La sólida integridad de Job avergüenza a Satanás y hace que huya presa del pánico
El amor de Job por el camino de Dios supera todo lo demás
En medio del sufrimiento extremo, Job se da cuenta realmente del cuidado de Dios por la humanidad
Otra manifestación del temor de Job hacia Dios y de apartarse del mal es su ensalzamiento del nombre de Dios en todas las cosas

¿A quién eres leal?

oración

Cada día que vosotros vivís ahora es crucial y muy importante para vuestro destino y vuestra suerte, así que debéis valorar todo lo que poseéis y cada minuto que pasa. Debéis sacar el mayor provecho a vuestro tiempo para obtener para vosotros mismos los mayores beneficios, para que no viváis vuestras vidas en vano.

martes, 2 de abril de 2019

Conocer la obra de Dios hoy

palabra de Dios

Conocer la obra de Dios en estos tiempos es, en su mayor parte, conocer qué es el ministerio principal de Dios encarnado en los últimos días y qué ha venido a hacer en la tierra. He mencionado anteriormente en Mis palabras que Dios ha venido a la tierra (durante los últimos días) para establecer un ejemplo antes de partir.